Un asesino en serie que violó y apuñaló a su víctima final 98 veces aplaudió en la corte cuando fue enviado a prisión por 71 años.
En un catalogado como vil ataque contra las familias de aquellos que Cameron Wilson apuntaba, al ser condenado, dijo en voz alta: “Al menos todavía estoy vivo”.
Fue encontrado culpable en un tribunal sudafricano de 13 cargos, incluyendo cinco asesinatos, una violación y tres intentos de asesinato.
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Entre las cinco personas que mató están Lekita Moore, de 18 años y de 16 años de edad, Stacey Lee Mohale, quien fue violada, apedreada y luego incendiada.
Wilson recibió cuatro años por los asesinatos de Toyher Stober, Stacey Lee Mohale, Lekita Moore y por la violación de Dawney Davids.
Se le sentenció 15 años por el asesinato de Alfonso van Rooyen, cinco años por posesión de un arma de fuego y municiones sin licencia, 15 años por el asesinato de Ernest Erasmus.
Además, 10 años por intento de asesinato y conspiración para cometer un delito, seis años por agresión con La intención de cometer graves daños corporales y 10 años por el asesinato de Roslyn Lakay.
Cuando se mencionaron estos dos últimos asesinatos, se rió y rodó los ojos cuando escuchó las penas.
Los miembros enojados por la actitud de Wilson gritaban: “Se pudrirán en el infierno” y “Asesino”.
