1- Se me va a ir el tren o voy a quedar vistiendo santos: Si tienes 30 y algo y no estás en pareja, de novia o derechamente casada, nuestra sociedad, nos indica que estamos “arruinadas”, así que o mejor nos apuramos o …. Vamos a terminar tejiendo calcetas y viviendo con 10 gatos. Ideas así solo nos angustian y lo que es peor, nos llevan a elegir estar al lado de cualquier cosa con tal de no estar solas.
2- Tic tac me hace mi reloj biológico: Nada peor que cuando uno llega a los 30 años, todo el mundo se anda preocupando de tus ovarios, tu útero y sus funciones. Frases como “oye, pero te queda poco tiempo para ser mamá”, “ojo que si se te pasa el tiempo y no lo eres, después te puedes arrepentir”, “¿y si te embarazas no más?”. Qué horror.
3- Tengo que tener la vida resuelta: Por una extraña razón se determinó que en la década de los 30 una tiene que tener todo delineado y pensado, tienes que estar asentada, de novia o casada, ojalá con hijos o con proyección de tener uno, ad portas de la casa propia, en un buen trabajo, ganando plata decente. Nada de sorpresas, porque pareciera que para eso están los 20. ¡Qué horror!