Un hombre sospechaba que su novia lo engañaba y por eso decidió contratar los servicios de un investigador privado para seguir a la joven.
El investigador confirmó las sospechas del individuo; a través de fotografías y videos documentó las veces que la mujer ingresaba a un hotel en Singapur, con otro sujeto.
Tras varias semanas de investigación, el detective privado entregó las evidencias al novio, quien quedó devastado.
Algunas semanas después el investigador se sorprendió al recibir la invitación para la boda de su cliente, pues pensó que sería suspendida.
Venganza
El novio decidió no preocuparse por el dinero desembolsado en una ceremonia y la boda se desarrolló con normalidad hasta que el hombre presentó ante todos los invitados un video con algunos de los mejores momentos que había disfrutado junto a su novia.
Los invitados quedaron atónitos cuando aparecieron las fotografías donde aparecía su novia junto a otro individuo entrando al hotel.
Durante la revelación mordaz, la novia salió corriendo del salón, avergonzada por haber sido expuesta.