Estados Unidos anunció este viernes nuevos gravámenes a las importaciones de aviones CSeries fabricados por la canadiense Bombardier.
Una semana después de anunciar derechos compensatorios de 220% a esos aviones el Departamento de Comercio estadounidense agregó otra medida “preliminar” antidumping con una tasa de 80%.
Las medidas buscan proteger a la estadounidense Boeing que alega que Bombardier se beneficia de subsidios comercialmente desleales que le permitieron vender 75 aparatos CSeries a Delta Airlines a un precio que está por debajo de su costo.
“Estados Unidos está comprometido en un comercio justo, limpio y reciproco con Canadá pero esta no es nuestra idea sobre como conducir adecuadamente la relación comercial”, dijo el secretario de Comercio, Wilbur Ross.
Según Boeing, Bombardier vendió sus aviones a 19,6 millones de dólares cada uno y ese valor es 13,6 millones por debajo del costo.
También denunció que Bombardier recibió más de 3.000 millones de dólares en subsidios de Ottawa y del gobierno de la provincia francófona de Quebec.
La decisión final sobre la controversia es esperada para el 19 de diciembre. Si es confirmada, los impuestos serían aplicados cuando los aviones comiencen a ser entregados a Delta el próximo año.
Tanto el gobierno de Canadá como Bombardier reaccionaron airadamente. Acusan a Boeing de manipular las normas comerciales de Estados Unidos para evitarse en un competidor en el estratégico mercado aeronáutico estadounidense.
“Estamos extremadamente disgustados y en completo desacuerdo con la determinación preliminar del departamento de Comercio de Estados Unidos”, dijo la ministra canadiense de Relaciones Exteriores, Chrystia Freeland.
Calificó de “infundados y absurdamente altos” los gravámenes estadounidenses. Bombardier, en tanto, dijo que son “demasiado atroces”.
“La hipocresía de Boeing es asombrosa”, dijo Nathalie Siphengphet, vocera de Bombardier. Añadió que todos los fabricantes de aviones, incluido Boeing, ofrecen descuentos.
Fuente: AFP