La Corte Constitucional de Colombia avaló este miércoles un acto legislativo presentado por el gobierno para que el acuerdo de paz con las FARC sea inmodificable por 12 años, lo equivalente a tres periodos presidenciales.
El máximo tribunal, encargado de salvaguardar la Carta Magna, declaró constitucional un acto legislativo presentado en julio mediante el cual se adiciona un artículo transitorio a la Constitución “con el propósito de dar estabilidad y seguridad jurídica al acuerdo” con la exguerrilla, ahora convertida en partido político.
La Corte declaró “exequible” (que se puede hacer) los dos artículos contenidos en el proyecto del gobierno de Juan Manuel Santos, que apuntaban a que todas las actuaciones de los órganos el Estado “deberán guardar coherencia e integralidad con lo acordado, preservando los contenidos, los compromisos, el espíritu y los principios del Acuerdo Final”.
Con el fallo, el alto tribunal expresó que el pacto con la que fue la principal guerrilla de América queda blindado, por lo que los gobiernos venideros deberán cumplirlo.
La sentencia “rige a partir de su promulgación hasta la finalización de los tres periodos presidenciales completos posteriores a la firma del Acuerdo Final”, es decir, se empieza a contar con el sustituto de Santos, que dejará el poder en agosto de 2018, apuntó.
La decisión de la Corte fue celebrada tanto por Santos como por la ahora Fuerza Revolucionaria Alternativa del Común (FARC).
El mandatario, cuyo gobierno firmó la paz con las FARC en noviembre tras cuatro años de negociaciones en La Habana, destacó en su cuenta en Twitter la “decisión unánime” del tribunal, que en su criterio “legitima y da estabilidad” a lo convenido.
El presidente del partido de los rebeldes y excomandante guerrillero, Rodrigo Londoño (“Timochenko”), también destacó la decisión. “En medio del atraso en la implementación e intenciones de modificar lo acordado, blindaje al Acuerdo Final es un espaldarazo a la paz”, escribió en la misma red social.
“Timochenko” se refirió a los anuncios de la oposición de derecha, liderada por el expresidente y ahora senador Álvaro Uribe (2002-10), que ha dicho que en caso de llegar a la presidencia modificará lo acordado con los insurgentes.
El partido de Uribe, el Centro Democrático, busca convocar un referendo para cambiar algunos puntos, pues consideran que el acuerdo garantiza impunidad a los guerrilleros que cometieron crímenes graves.