Las personas a veces están felices cuando las cosas van bien, tristes cuando van mal, enfadados cuando no sale algo como quieren, con tensión ante situaciones complicadas y es algo normal ya que por algo existen las emociones pero el problema viene marcado si un individuo sufre esos estados de ánimo y alguno más sin causa aparente. A ese tipo de personas se las conoce como inestables emocionalmente y sus emociones, en vez de aparecer para solucionar problemas o acordes con la situación que se vive, llegan de forma muy intensa y de forma muy descontrolada.
Muchas personas desconocen los síntomas más importantes de la inestabilidad emocional y no descubren que su pareja lo padece. Para ello, dejamos claras señales para poder identificar este problema y buscar una solución antes de que la relación se descontrole.
ENFADOS DIARIOS
Tienden a ser muy sensibles a todos los cambios y, por ello, algunos especialistas consideran que viven la vida con intensidad pero la realidad es que sus emociones tienden, la mayor parte de los casos, al enfado, la tensión o al malestar.
Por lo tanto, la primera señal de la inestabilidad emocional en un miembro de la pareja es que gran parte de los días responde mal, no da señales de felicidad, se enfada por cualquier cosa que ocurra dentro del entorno de la relación y no busca soluciones sino que más bien las provoca.
CAMBIOS DE HUMOR MUY RÁPIDOS
Cambien su estado de humor muy rápidamente aunque siempre con tendencia al mal humor pero se producen cambios de cualquier tipo. De repente está muy enfadado y en pocos minutos vuelve a su estado normal como si no hubiese pasado nada o viceversa.
Esto se puede confundir con cambios de humor habituales que tienen todas las personas pero la diferencia, que es muy notable, es que en un periodo muy corto de tiempo pueden variar su estado de ánimo varias veces y de un extremo a otro como puede ser de sonreír y estar feliz a llorar y sentirse angustiado.
INTOLERANCIA A SITUACIONES DE ESTRÉS
Baja tolerancia que tienen estas personas a las situaciones inesperadas, que le generan estrés, o de toma de decisiones en las que se requiere un cierto liderazgo. Cuando se somete a gente inestable emocionalmente a este tipo de situaciones suelen agobiarse y responder de malas formas, enfadándose o con sentimiento de tristeza.
No tienen que ser situaciones de gran estrés en la relación, se pueden frustrar simplemente con decisiones tan simples como el lugar de vacaciones de la pareja o elegir que seguro es el más apropiado para la casa familiar o el coche nuevo que acaban de comprar.
PROBLEMAS DE COMUNICACIÓN
Tienen problemas de comunicación y sus relaciones personales con la familia o amigos son escasas. El bajo control que tienen sobre sus emociones provocan una reducida vida social que a veces es nula.
Suelen ser personas solitarias, en el sentido que no tienen demasiado contacto con sus padres o hermanos, no sale con sus amigos porque tiene pocos o porque no le apetece o ha tenido muchas amistades pero le han durado poco tiempo por sus cambios repentinos de humor.
¿TIENE SOLUCIÓN?
Se puede controlar esa inestabilidad acudiendo a un psicólogo que le realice un seguimiento, le aplique una rutina y trabaje intensamente con la persona que lo padece. Es difícil controlar las emociones pero con tiempo pueden llegar a dejar atrás su problema.