En el programa A Primera Hora estuvieron como invitados Mario Polanco, director del Grupo de Apoyo Mutuo (GAM), y Carlos Mendoza, coordinador del Observatorio de la Violencia Diálogos, quienes efectuaron un análisis de los informes de homicidios y hechos de violencia en el país.
Ambos coinciden en que los índices estadísticos de violencia han bajado en Guatemala en los últimos diez años y señalan la improvisación de las autoridades de Gobernación por la falta de políticas específicas de seguridad y por los cambios abruptos en la cúpula policial.
MARIO POLANCO
¿En qué se basa el GAM para decir que los índices de violencia están bajando?
Nosotros usamos información del Instituto Nacional de ciencias Forenses (Inacif) porque si los combinamos con los que maneja la Policía Nacional civil (PNC) cambiaríamos los datos. Yo no sé porqué ambas instituciones, siendo del Gobierno, tienen distintos resultados.
Hemos detectado cómo, a partir del año 2010, se comienza a generar un descenso, que nos satisface. En 2009 pudimos llegar a tener 43 homicidios por cada 100 mil habitantes. Pero la población no percibe esto.
Creo que lo que ocurre es porque la población mezcla los niveles de inseguridad: asaltos, robos en buses, extorsiones, muertes. Impactan las muertes, claro.
Solo este año ha habido ocho personas desmembradas. Ese tipo de crímenes, aunque pocos, impacta. La percepción de la gente es que la violencia va en aumento.
El gran reto es que la población perciba que baja la violencia. El número de muertes por año sigue siendo alto. El año pasado hubo 5 mil 673 personas muertas. Este año van 1 mil 975. Sin embargo, en los últimos siete años se registraron 40 mil 612.
Pareciera que estamos en una guerra. No tenemos datos para contrastar con el número de procesos abiertos, pero el MP debería saber de estos muertos en esos siete años.
CARLOS MENDOZA
¿Son fiables los números que señalan una baja en los homicidios?
Los indicadores son fiables en el sentido de que tenemos varias fuentes. La que yo tengo en Diálogos es la de la PNC desde el 1995. Podemos ver los números de municipios, de lugares poblados que también se pueden constatar con otras fuentes como es el Inacif, que recibe los cadáveres y registra una tendencia a la baja.
Según la PCN el índice de violencia ha bajado en 50 por ciento, desde el máximo de julio del 2009. El Inacif tiene a la baja desde diciembre de 2009, con 40 por ciento. Lo que ocurre es que la realidad no siempre coincide con las percepciones.
En la ciudad, en 2017 era a la inversa, estaba subiendo el índice, pero en los últimos cinco meses ha estado bajando. Todo depende de dónde se ubica uno y la tendencia de los hechos de violencia. No quiere decir que haya un fake news pero en la medida en que uno se expone a esas noticias recibe más violencia.
La violencia en el corto plazo se comporta por ciclos. Aunque la tendencia vaya hacia abajo, va por ciclos, puede subir y puede bajar. Los datos son bastante confiables. Los de la PNC, del Inacif y los del Instituto Nacional de Estadística (INE).
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