Burberry, una marca de lujo británica es criticada por quemar 38 millones de dólares en mercancía con el fin de proteger su prestigio entre los consumidores.
Con el objetivo de impedir que sus diseños sean robados o vendidos a un precio inferior al que corresponde, Burberry decidió destruir todos aquellos productos sobrantes.
Entre la mercancía incinerada se encuentra ropa y productos de belleza.
Según la firma, el proceso no contaminó ya que la energía de la incineración fue almacenada.
Burberry reconoció que el pasado año el volumen de productos destruidos fue superior a lo habitual, dado que tuvieron que deshacerse de una gran cantidad de perfumes tras haber firmado un nuevo acuerdo con la marca estadounidense Coty.
“Burberry es muy cuidadosa al tratar de minimizar la cantidad de existencias sobrantes que producimos. En los casos en que es necesario deshacerse de los productos, lo hacemos de manera responsable y buscando siempre la forma de reducir y revaluar nuestros residuos”, aseguró un portavoz de la compañía.
Sin embargo, usuarios en redes sociales criticaron a la marca ya que los productos debieron llegar a personas que menos poder adquisitivo o incluso ser donados; sin embargo, Burberry quiere conservar su estatus como marca de lujo.
Con información de EFE
