Tuvo que visitar el banco de semen tres veces antes de comenzar con su proceso…
Parece ser una idea bastante práctica y es que una mujer transgénero decidió congelar su esperma de cuando aún era hombre. De esta forma, tendría la posibilidad de ser procrear un hijo en el futuro, como cualquier persona que desea formar una familia para sentirse en plena realización.
Lea Membrey, de 20 años, visitó el banco de esperma tres veces antes de empezar a tomar hormonas femeninas para que en el futuro aún pudiese ser un padre biológica.
La mujer de Auckland, Nueva Zelanda, comenzó su transición en julio de 2015 y desde entonces ha invertido cerca de siete mil dólares en su cuerpo, considerando implantes mamarios, relleno en los labios, inyecciones de bótox y eliminación de pelo por medio de láser.
Sus hormonas se encuentran ahora al mismo nivel que las de una mujer biológica y ahora espera poder hacer su operación de cambio de sexo en el futuro.
Mientras tanto, sigue cambiando su apariencia exterior, lo que incluye limar el hueso de su mandíbula y cejas.
Aunque no planea tener hijos pronto, quiere que cuando la hora llegue sean naturalmente de ella, es por eso que decidió congelar su esperma para el futuro.
“Definitivamente quiero tener hijos en los próximos diez años y tener uno que sea biológicamente mío es importante para mí. Es increíble saber que aún puedo tener un bebé que tiene la mitad de mi ADN.
Tuve que almacenar el semen antes de comenzar tratamientos hormonales, pues cuando empiezas el tratamiento tus órganos masculinos eventualmente dejan de funcionar”.
Dos años después de comenzar el proceso, el nivel de su testosterona es bastante bajo, al mismo nivel de una mujer biológica.
Lea recibió abusos en la escuela por ser gay, pero su percepción cambió tras conocer a una hermosa mujer transgénero en una fiesta. En ése momento supo cómo sentirse cómoda con sí misma y descubrió quién era realmente.
