Recientemente se supo que una joven de 23 años, originaria de Guadalajara Jalisco, se había quitado el ombligo para entregárselo a su novio. Aunque el ombligo es el conducto que existe entre la madre y el bebé para lograr transmitirle los nutrientes y el oxígeno, ya después de nacer, realmente no nos sirve para nada, ya solo queda como un detalle estético en el cuerpo.
De acuerdo con su relato lo hizo para cortar relaciones con sus familiares y demostrarle a su entonces novio cuánto lo quería.
“Estaba muy enamorada de mi novio de entonces, él me apoyó en muchos momentos difíciles y es una de las personas más influyentes de mi vida. Lo puse en una bolsa pequeña con una nota que decía ‘Te quiero’ fue algo muy emotivo”.
La chica se llama Paulina Casillas Landeros y se realizó esta operación en el 2005, fue una recuperación bastante doloroso por no haber tenido los cuidados necesarios.
Aunque meses después ella terminó esa relación, comenta que ahora, a tres años de haberse quitado el ombligo, ella se arrepiente de ese acto ya que lleva una mejor relación con su familia y sobre todo con su madre.