A pesar del éxito rotundo que está teniendo Taylor Swift tras el lanzamiento de sus últimos sencillos, la cantante se encuentra pasando por uno de sus peores escenarios, y es que Scooter Braun compró la empresa Big Machine Label, misma que fuera la encargada de producir todos los álbumes de Taylor Swift.
Dicha compra ha hecho acreedor a Scooter Braun, de gran parte de los derechos de la música de la cantante, y ahora es el dueño de los masters de las grabaciones.
El problema radica en que este sujeto habría sido un acosador de la cantante, pues le hacia bullyng y la fastidiaba durante años, situación que enojó a Taylor Swift, quien no se quedó callada, y se manifestó a través de redes sociales.
“Mi legado musical está a punto de caer en manos de alguien que intentó desmantelarlo”, escribió Taylor Swift.