Meghan Markle reconoce que echa de menos su antigua profesión…

La duquesa de Sussex voló hasta Irlanda con el príncipe Harry y allí confesó que sigue acordándose de ‘Suits’, la serie que protagonizó durante siete temporadas.

Siempre la vemos con una sonrisa, pero a pesar de su evidente felicidad, Meghan Markleecha de menos su antigua vida. Al menos, algunas cosas de ella. Hace unos meses, tuvo que renunciar a su profesión como actriz y abandonó Suits, la serie en la que llevaba trabajando siete años y que le dio el último empujón a su carrera.

También tuvo que renunciar a su antiguo blog, en el que escribía lo que le pasaba a diario; o a estar cerca de su familia y amigos. Pero, sin duda, una de las cosas más duras para la duquesa de Sussex fue tener que dejar a uno de sus dos perros en Toronto con unos amigos. El can era demasiado mayor para viajar, así que la royal pensó que la mejor opción sería dejarlo tranquilo. Por suerte, su beagle Guy la ha acompañado a su nuevo hogar.

Pero una de las particularidades de Markle es que, a pesar de que cumple con las normas de la realeza, no lo hace de manera tan estricta como su cuñada Kate Middleton. Al fin y al cabo, ella no aspira -al menos, por el momento- a convertirse en reina de Inglaterra. Y eso le permite comportarse de manera un poco más laxa en su día a día; al menos, cuando se encuentra a cientos de kilómetros de la reina Isabel II.

En su primer viaje oficial como duquesa de Sussex a Dublín, Markle destiló una naturalidad controlada, que enamoró a todos los irlandeses. Porque la royal no está dispuesta a renunciar a la honestidad; algo, que en cierto modo, le viene bien a la Corona. Y ayer, después de visitar el Museo de la Inmigración Irlandesa de Dublín volvió a demostrar que su nuevo título no la ha cambiado.

Lo confirmó Fiona Moore a The Daily Mail: “Soy fan de Suits y le dije que lo echaba de menos y ella me dijo ‘yo también’”, aseguró esta fuente. Un comentario que no nos coge por sorpresa, pero que nos recuerda que no todo en la vida de la royal es un campo de rosas.