Una madre lloró en el tribunal cuando describió lo que sintió al haber encontrado el cadáver de su hijo de cinco años después de que se ahogara en una letrina escolar en Sudáfrica.
Michael Komape, un alumno de la escuela primaria Mahlodumela en la provincia septentrional de Limpopo, desapareció después de ir al baño.
Su madre, Rosina, le dijo a un tribunal que recibió una llamada del director a quien le habían dicho la terrible noticia. Cuando llegó, vio el brazo de su hijo “pero no pudo ver el resto de su cuerpo”.
La Sra. Komape se desmayó y más tarde dijo que la familia había quedado traumatizada por el incidente.
Ella y su esposo James decidieron demandar al Ministro de Educación Básica, que niega la responsabilidad por el ahogamiento. Han afirmado que los inodoros estaban dilapidados y no aptos para uso humano.
Según la BBC, también están demandando al Ministerio de Educación de Limpopo y al director de la escuela, alegando que actuaron de manera negligente o en violación del derecho constitucional de los alumnos a una educación básica.
