Con “Burning”, en competición en el Festival de Cannes, el director surcoreano Lee Chang-dong, un asiduo del certamen, presentó un filme sinuoso, entre thriller e historia de aprendizaje, en torno a una misteriosa desaparición.
A partir de un relato corto del escritor japonés Haruki Murakami, “Las granjas quemadas”, Lee Chang-dong, de 64 años, explica la historia de Jongsu (Yoo Ah-in), un joven que comparte su vida entre su trabajo de mensajero y la granja de su padre, y sueña con ser escritor.
Por casualidad, se cruza con Haemi (Yun Jong-seo), una chica con la que creció. Antes de que ella emprenda un viaje a África, se vuelven a ver.
A su regreso, Haemi le presenta a Ben (Steven Yeun, de la serie estadounidense “The Walking Dead”), un hombre rico y enigmático que conoció durante el viaje y con quien inicia una relación. “Pensé que el misterio en este relato de Murakami podría desarrollarse en varios niveles en el filme”, dijo el jueves Lee Chang-dong en rueda de prensa.
“Al principio, dudé un poco en adaptarlo. Pero vi que este misterio podía dar algo muy cinematográfico”, agregó.
“Burning” es la sexta película del cineasta surcoreano, y la tercera en liza por la Palma de Oro. En 2010, ganó el premio al mejor guión en Cannes por su anterior obra, “Poetry”.
Con “Burning”, el director, escritor y ministro de Cultura de su país en el periodo 2003-2004, dijo que quería tratar también “la rabia de los jóvenes de hoy”, golpeados por el desempleo.
“Los jóvenes están indignados, pero no saben hacia dónde dirigir esta cólera”, insistió.
La prensa acogió con entusiasmo el filme, que se posicionó rápidamente entre los primeros de las apuestas para la Palma de Oro. En el panel de los 10 críticos de Screen, “Burning” estableció el récord histórico de mejor puntuación, con un 3,8, superando el anterior récord, de 3,7, en manos de la alemana “Toni Erdmann”, en 2016.
AFP.