“Whis podrías mostrarme la banda de insectos que tiene molesto al Sr. Bills”, preguntó Vegeta.
“Claro, mira mi báculo”, respondió Whis:
Sin cruzar palabra Vegeta se colocó un delantal y se puso a cocinar algo que sabría le quitaría de la cabeza al Sr. Bills su deseo de destrucción.
Tan rápido como pudo preparó un platillo delicioso y se lo ofreció a Whis, momento el cual este llamó al Sr. Bills y le dijo:
“Señor tiene que probar esto, está delicioso y si destruye la Tierra no podremos volver a comerla… sería una pena…”, sugirió.
En ese momento Mr. Bills sonrió macabramente y dirigiéndose a Vegeta la dijo: “Muy bien Vegeta veo que aprecias a las sabandijas de tu planeta… .”
“No Señor pero tampoco deseo quedarme sin casa”, respondió con una sonrisa irónica y orgulloso de haber salvado la Tierra sin ayuda de Kakarotto.