El español Alberto Contador (Trek Segafredo) ha asegurado hoy que en su decisión de abandonar el ciclismo tras la Vuelta no va a influir el resultado que obtenga: “No hay sitio mejor para despedirme y estoy seguro de mi decisión”.
“Independientemente del resultado de la Vuelta no habrá cambio. Estoy seguro de mi decisión”, ha manifestado en su comparecencia previa al comienzo de la 72 Vuelta a España mañana en Nimes (Francia).
Contador ha explicado que se trata de una decisión que tenía bastante pensada, “al 70 por ciento antes del Tour”, aunque con su director Luca Guercilena habían sopesado incluso prolongarla hasta el Giro de 2018.
“La respuesta sabía que me la daría el Tour y no porque ganase a o perdiese. Llegaba en óptimas condiciones, pero lo vi claro ya en la novena etapa y tomé la decisión definitiva”, ha recordado.
Al Tour de Francia ha asegurado que llegó “realmente bien, en el peso óptimo y con números en los entrenamientos de los mejores, como en 2014, pero llegaron las caídas que no estaban en el plan”.
Contador ha recalcado que se encontró “cosas en el camino que hicieron que el trabajo hecho no pudiera lucir”.
Por todo ello y con la decisión ya tomada, el de Pinto ha asegurado que su equipo “tenía que saber” sus planes “y por eso lo comuniqué”.
En la Vuelta su objetivo es “dar el máximo como siempre”.
“Voy a ser profesional hasta el último día”, dijo. “Va a ser especial y voy a disfrutarla al máximo. Creo que es el sitio idóneo para despedirme”.
En cuanto a los favoritos, en su opinión hay dos corredores que lo son con más claridad que el resto, el británico Chris Froome (Sky) y el italiano Vincenzo Nibali (Bahrain Merida).
“El mejor preparado es Nibali y el favorito es Froome porque es muy fuerte en la contrarreloj y por su equipo, en el que sus gregarios serían líderes en otro equipo”, ha afirmado.
En otro grupo y a la espera de ver cómo asimilan el haber competido en el Tour ha incluido a Fabio Aru (Astana), Romain Bardet (AG2R) y Adam Yates (Orica Scott) en los que “habrá que ver su capacidad de recuperación”.
Él mismo llega en situación parecida a Aru, Bardet y Yates: “Nunca había acabado el Tour y había hecho la Vuelta, siempre había venido tras un percance como en 2014 y 2016”, por eso su preparación ha sido “muy diferente” y ha descansado. “Pero es una incógnita cómo voy a rendir”.
Contador ha negado con un “no” rotundo que su proyecto de equipo continental haya tenido algún tipo de influencia en su decisión de abandonar el ciclismo de elite, aunque también ha manifestado su ilusión por poder dedicarle a partir de ahora más tiempo porque considera que se va a convertir “en un proyecto referente que dará la oportunidad a muchos jóvenes”. EFE
