Neil Tweedy, de 45 años, había soportado la violencia de su esposa Helen desde 2005, el hombre recibía patadas, golpes, pero nadie le creía.
El esposo maltratado decidió instalar una cámara escondida en su casa para grabar en secreto a su esposa atacándol.
La víctima registró secretamente ya que temía que las autoridades no lo creyera, sin pruebas.
El abogado defensor James Street dijo a la corte que la maestra de escuela, tenía problemas de salud mental significativos, causados por el consumo excesivo de alcohol.
Una corte de magistrados de Manchester, emitió una orden de restricción que le prohíbe a la mujer contactar a su marido, así como 120 horas de trabajo no remunerado.
Uno de cada tres víctimas de violencia doméstica es varón, según un estudio realizado en 2017 por Mankind Initiative, una organización benéfica que ayuda a los hombres a escapar de la violencia doméstica.
La investigación también encontró que las víctimas masculinas son tres veces más probables que las víctimas femeninas de no decirle a nadie sobre el abuso.