Este lunes se abrió un juicio contra tres exempleados de una residencia de ancianos en el oeste de Alemania por presuntamente haber matado a dos jubilados y haber maltratado a muchos otros, actos que solían filmar.
Los tres acusados -dos hombres y una mujer-, que habrían actuado así “por aburrimiento”, según el fiscal, fueron detenidos después de que una de sus colegas descubriera las imágenes de los hechos en sus celulares, informó la agencia alemana DPA desde Frankenthal, donde tiene lugar el juicio.
Son sospechosos de haber asfixiado con un cojín a una señora de 85 años, a quien habían administrado insulina anteriormente.
Los dos hombres también están siendo procesados por haber matado a otra usuaria del centro, de 62 años, inyectándole una dosis demasiado alta de insulina.
Los tres procesados son sospechosos de haber intentado matar a una mujer de 89 años administrándole insulina y morfina, y de haber agredido sexualmente a otra jubilada.
Por otro lado, la justicia los acusa de haber maltratado regularmente a personas ancianas a su cargo, lanzándoles objetos y administrándoles medicamentos que no necesitaban, como laxantes, y de haber filmado y fotografiado sus fechorías.
“Los acusados actuaron por aburrimiento. Quisieron ejercer su poder sobre los jubilados. ¡Sus móviles son débiles y pérfidos!”, explicó el fiscal Herbert Stroeber, citado por el diario Bild.
El proceso, que en principio se prolongará hasta finales de noviembre, podría adquirir una dimensión aún más importante, pues se solicitó una investigación para aclarar las muertes de otros 40 usuarios del establecimiento, para saber si éstas pudieron haber sido provocadas.