Se descalzó para entrar en el césped del Camp Nou, en señal de respeto y agradecimiento a Dios por su fichaje
Yerry Mina pisó por primera vez el césped del Camp Nou como jugador del Barcelona, y cumplió con un ritual que ya hizo en el Palmeiras y en sus anteriores clubes.
El central colombiano, profundamente religioso, tiene como costumbres descalzarse antes de pisar por primera vez su nuevo estadio, en señal de agradecimiento a Dios y de respeto a su nuevo feudo.
Ante la mirada atenta de cientos de espectadores, muchos de ellos de su país, se quitó las botas y los calcetines para cruzar la línea de cal descalzo, con los brazos apuntando al cielo y musitando una oración al cielo. Concretamente se refiere a un pasaje de la Biblia, el Deuteronomio 11:24: “Todo lugar que pisare la planta de vuestro pie, será vuestro; desde el desierto y el Líbano; desde el río, el río Eufrates, hasta el mar postrero será vuestro término”.
“Estoy muy contento por estar aquí en el Barcelona. Gracias a todos los que hicieron realidad el poder venir al mejor club del mundo. Quiero aprender mucho de mis compañeros y aportar mi grano de arena. Ahora toca aprender mucho, ganar cosas grandes y hacer que el grupo sea más grande. Estaré con los pies en la tierra y los ojos en el cielo. Iré objetivo por objetivo”, prometió.