Nairobi – La misión de la ONU en la República Democrática del Congo (RDC), la MONUSCO, anunció que supervisará las manifestaciones contra el Gobierno convocadas por la oposición y párrocos católicos para mañana domingo y pidió que sean pacíficas, después de que las protestas de diciembre dejasen al menos ocho muertos.
Tanto cascos azules como policías y miembros de la Oficina Conjunta de Derechos Humanos de la misión formarán equipos que patrullarán las calles de Kinshasa y de las principales ciudades del país, para denunciar posibles episodios de violencia o violaciones de los derechos humanos.
La MONUSCO recuerda que el derecho a la reunión pacífica está protegido por la Constitución congoleña e insta a los manifestantes a protestar de forma “calmada y comedida”.
“Todas las partes, ya sean manifestantes o fuerzas de seguridad, deben evitar recurrir a cualquier forma de violencia”, exhorta.
Asimismo, subraya que no es responsable de mantener el orden público, sino que es el Estado congoleño el que debe encargarse de ello, respetando siempre las leyes nacionales y los estándares internacionales.
“Es importante que todas las partes puedan expresarse de manera pacífica y calmada en este período de transición política para fomentar un debate democrático de acuerdo con la Constitución”, reclamó el director de la MONUSCO y representante del secretario general de Naciones Unidas en la RDC, Maman Sidikou.
Recordó la necesidad de implementar medidas que aumenten la confianza para generar un ambiente favorable a la celebración de elecciones “libres, creíbles, transparentes y pacíficas” el 23 de diciembre próximo.
Con información de Agencia EFE