Un estadounidense que voló a Siria para combatir al Estado Islámico, afirma que sobrevivió gracias a los que aprendió jugando Call of Duty.
John Duttenhofer, de Colorado, viajó a Siria en abril pasado para unirse a las Unidades de Protección del Pueblo Kurdo (YPG) en Raqqa, la ciudad que finalmente fue liberada de ISIS en octubre.
Duttenhofer pasaba hasta 13 horas al día jugando Call of Duty, lo que le dio las habilidades básicas de combate y la comprensión de las armas que necesitaba para sobrevivir durante seis meses en la zona de guerra.
“Quería luchar contra ISIS. Por el otro, quería ser parte de algo que era histórico e innovador. No tenía miedo a morir ni nada por el estilo”, explicó.
Duttenhofer primero decidió viajar a Siria en 2015 después de leer acerca de los horrendos crímenes cometidos por miembros del llamado Estado Islámico.
Vendió su automóvil, ahorró 7 mil dólares, se puso en forma viajando en bicicleta al trabajo y compró equipo de combate antes de volar para reunirse con miembros de YPG, a quienes había contactado en línea.
En Kurdistán, conoció a otros voluntarios de todo el mundo y pasó unas semanas en una academia aprendiendo kurdo básico y sometiéndose a entrenamiento con armas.
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— John Duttenhofer (@JohnDuttenhofer) 28 de julio de 2017
Al encontrarse a sí mismo entrando en el campo de batalla con un AK47, Duttenhofer dijo que su experiencia de jugar videojuegos realmente resultó invaluable.
“Los videojuegos me prepararon para conocer estrategias y cómo no morir, como usar la cubierta y no permanecer al aire libre”, dijo.
Duttenhofer finalmente regresó a los Estados Unidos el 12 de febrero, después de pasar seis meses en Raqqa junto a una unidad de francotiradores de soldados kurdos.
Con información de Daily Mail
