El técnico azulgrana ha confirmado que habrá cambios en el equipo de cara al encuentro del Celta, equipo al que ha calificado de “complicado”
Tras el triunfo ante el Valencia (2-1), la Liga no permite descansos. Superado el exigente duelo contra los de Marcelino, el equipo deberá afrontar la jornada 33 en Balaídos ante el Celta. Para Ernesto Valverde, el conjunto gallego es “un rival de entidad” muy potente en su estadio, donde “hace buenos partidos contra los equipos de la parte alta”. El entrenador culé ha confirmado que hará cambios, ya que el equipo afronta “una semana de partidos intensos, y se debe dosificar a los jugadores”.
El técnico ha asegurado que sumar los tres puntos en este punto de la temporada acerca muchísimo al equipo al título, que es el objetivo del equipo. Para Valverde, terminar la Liga invictos “es un aliciente”. Pero, al mismo tiempo, ha recordado que el equipo “todavía no ha ganado nada”. El de Viandar de la Vera ha confirmado que espera un Celta que plantee un encuentro parecido al de la ida y el de la Copa del Rey disputado en Vigo, un rival que haga “una presión muy alta”, que intente “impedir la salida limpia del balón “.
Un rival peligroso con el balón y jugando a la contra
Sin embargo, el preparador azulgrana ha puntualizado que el equipo entrenado por su antiguo compañero en el FC Barcelona Juan Carlos Unzué, es un conjunto que domina varios registros. Para Valverde, el Celta es un equipo que te puede superar “a la contra y también en el juego de posición, ya que también lo dominan”.
Preguntado por la pareja de delanteros del conjunto gallego, Valverde ha alabado a Iago Aspas, del que ha comentado que “está jugando de manera increíble” y a Maxi Gómez, de quien ha destacado que “es una de las sorpresas de la temporada”, además de añadir que “se complementa muy bien” con el delantero de Moaña.
