El centrocampista James Rodríguez, en pleno momento dorado en el Bayern de Múnich, se reencuentra con el Real Madrid, el club del que salió hace unos meses, en un duelo de altos vuelos por una plaza en la final de la Liga de Campeones.
“Por supuesto que estos dos partidos son especiales para mí”, aseguraba James en una entrevista con el diario alemán TZ, recordando que “he jugado tres años allí, fui feliz y tengo buenos amigos y recuerdos de mi tiempo en Madrid”.
El jugador cafetero se reencontrará con sus antiguos compañeros, cerca de un año después de abandonar el club blanco, en un clásico del fútbol europeo por una plaza en la final de la Liga de Campeones.
Llegado al Real Madrid en 2014 tras brillar en el Mundial de Brasil como el máximo goleador del torneo con 6 tantos, James vivió un primer año espectacular en que jugó 46 partidos y marcó 17 goles, para luego ir perdiendo protagonismo en las dos campañas siguientes.
– Confianza de Heynckes –
La dura competencia con la BBC (Bale, Benzema, Cristiano Ronaldo) y la ascensión de jóvenes como Francisco Alarcón ‘Isco’ acabaron por precipitar su cesión al Bayern por dos años con una opción de compra al final de la misma, que todo hace pensar que podría hacerse efectiva.
En el equipo alemán se reencontró con el técnico Carlo Ancelotti, haciéndose un hueco que ha mantenido con el sucesor del italiano, Jup Heynckes, que ha mantenido al colombiano entre sus habituales, pese a las dudas iniciales.
“Tiene toda mi confianza y eso demuestra lo bien que está, tanto física como técnicamente”, afirmaba Heynckes en una rueda de prensa previa a la ida de los cuartos de final contra el Sevilla.
El mediapunta colombiano, de 26 años, está siendo uno de los hombres más destacados del equipo alemán esta temporada, en la que ha marcado 6 tantos, pero ha hecho el doble de asistencias de gol para sus compañeros, a los que se ha adaptado muy bien.
Los pases medidos del colombiano benefician a Franck Ribéry o Arjen Robben en sus desmarques, al tiempo que, respaldado por Javi Martínez en la medular, James se siente libre para moverse entre líneas.
Su visión de juego está siendo fundamental para el desarrollo del fútbol del equipo alemán, donde ha retrasado unos metros su posición para recibir el balón con comodidad y tomar la mejor decisión.
“Estoy muy contento por los minutos acumulados a lo largo de esta temporada”, dijo James al diario AS, señalando que “cuanto más juego, más puedo darle al equipo y el míster lo sabe”.
– En busca de su tercera ‘Orejona’ –
James sabe lo que es ganar la Liga de Campeones con el equipo blanco, ya que hasta en dos ocasiones se ha llevado la ‘Orejona’ con los merengues, la última el pasado año, aunque no tuvo ni siquiera la oportunidad de vestirse de corto en esa final contra la Juventus (4-1), en la que fue uno de los descartes de Zinedine Zidane.
Ahora James tiene la oportunidad de llegar a nueva final europea con el club alemán, al que el Real Madrid apeó el pasado año en cuartos de final, pero el colombiano advierte que “no hay que tomárselo como una revancha, sino como un par de partidos más en busca de esta final”.
De hecho, James ni siquiera piensa en reivindicare ante su antiguo equipo, sino solo “poner mi granito de arena para que podamos emprender el viaje a Kiev”, sede de la final europea.
Pero, antes de emprender ese viaje, James y el Bayern tendrán que superar dos duras paradas en Múnich y Madrid. (AFP)