Con el tiempo, y obviamente con varias experiencias, la vida te va enseñando que no todas las personas tienen buenas intenciones. De hecho, podemos identificarlas con ciertas señales para alejarnos de ellas, y de esta manera no dejarnos intoxicar. Y por esa misma razón, quiero compartirlas.
- Dicen los expertos que este tipo de personas son controladoras, y tienden a irritarse cuando pierden el control de las situaciones, así sea la más sencilla.
- Vela solamente por su beneficio, y de hecho tiende a burlarse de las reglas por su propia conveniencia. Generalmente ignoran el concepto del bienestar colectivo y no perciben que sus actos pueden perjudicar a los demás. De hecho, les importa poco o nada.
- Además, son muy hábiles a la hora de crear peleas o discusiones, y de hecho lo disfrutan. “Se divierten mirando el caos que crean a su alrededor”.
- No sienten culpa ni remordimiento. Generalmente no se arrepienten de lo que generan y se sienten mejores que los demás por salir “limpios” de las situaciones negativas que crean.
- No asumen la responsabilidad de sus actos. Les gusta mandar y manipular, pero no admiten sus errores.
- Exigen mucho de los demás, pero no ofrecen nada a cambio. Por otro lado tienden a demostrar desprecio o falta de interés sobre la vida de sus amigos, parejas o parientes.
- Además, tienden a generar un clima de competencia que genera incomodidad o humillación.
- Y por si esto fuera poco, sienten satisfacción en promover y provocar el bullying y menospreciar a los demás. Por otro lado, tienden a criticar a los demás y son prejuiciosos.
Sí, se me vinieron a la mente varios conocidos, pero sobre todo uno. Y me imagino que te pasó lo mismo, así que, en la medida de lo posible…aléjate de este tipo de personas. Rodéate de gente positiva y que aporte a tu vida.
Fuente: https://bit.ly/2KHwOty