El boliviano-estadounidense Jorge Roca Suárez, considerado como uno de los mayores narcotraficantes de Sudamérica en la década de 1980, negó haber huido de una clínica en La Paz, como lo ha asegurado la Policía Boliviana, y afirmó tener una orden judicial de libertad condicional.
Roca Suárez, apodado “Techo’e Paja”, aparece en diversos videos difundidos en las últimas horas en las redes sociales para explicar que dejó la clínica en la que estaba ingresado para un tratamiento médico porque desde el pasado jueves 6 cuenta con una orden de libertad del Juzgado Cuarto de Ejecución Penal de La Paz.
La citada orden deja en suspenso otra resolución que revocó la libertad condicional de que gozaba mientras se resuelve una apelación que presentó a aquella decisión, indicó.
“Las autoridades fueron notificadas, el recinto penitenciario fue notificado. El recinto retiró el custodio que estaba custodiándome. Me fui de la clínica porque ya había terminado el tratamiento médico que me estaban aplicando”, manifestó Roca en uno de los videos.
Roca, que se encuentra en su natal Santa Ana, en la región amazónica de Beni, también mostró una copia de la orden judicial que, según dijo, está dirigida al gobernador de la cárcel paceña de San Pedro.
“¿En qué momento violé la ley para escaparme? No entiendo. Y ahora me vine a mi pueblo, estoy en mi pueblo con mi familia, con mi gente, con mis amigos, con mis seres queridos y aquí voy a estar”, agregó y pidió que se haga “justicia” en su caso.
El hombre respondió de esta forma a la Policía Boliviana, que el sábado informó sobre su supuesta fuga de una clínica privada y la activación de un operativo para capturarlo.
Las autoridades policiales también señalaron que el policía que custodiaba a Roca fue aprehendido con fines de investigación.
“Techo’e Paja”, de 67 años, fue extraditado en abril pasado desde Estados Unidos, donde fue detenido en diciembre de 1990 y le sentenciaron a treinta años y cinco meses de prisión.
Desde entonces cumplió reclusión hasta que la Justicia lo benefició con la reducción de su pena por buen comportamiento y autorizó su traslado a Bolivia.
Roca estuvo en una cárcel de La Paz desde su llegada en abril hasta julio pasado, cuando obtuvo la libertad condicional.
Esa medida fue revocada el mes pasado y se dispuso nuevamente su reclusión en La Paz.
En la década de 1980, Roca fue el lugarteniente de su tío Roberto Suárez Gómez, considerado “el rey de la cocaína” de Bolivia.
En su momento fue considerado por la DEA estadounidense como uno de los mayores traficantes de droga de América y jefe de una vasta red de producción y comercialización de cocaína, por la que también fueron a prisión su madre y otros familiares. EFE