Su tenacidad y esmero se plasman en la pista del coloso de la zona 5; sonriente y siempre concentrada en cada salto, Thelma Fuentes se ha convertido en una de las mejores exponentes del atletismo nacional, un recorrido que hoy compartimos en la siguiente entrevista.
“Representar a mi país es algo que aunque trate de describirlo, nunca voy a encontrar las palabras. Es un orgullo y un privilegio. Pero al mismo tiempo es mucho esfuerzo y mucha responsabilidad”, comentó la saltadora de 26 años.
Involucrada en el deporte desde su nacimiento, gracias a su padre Víctor Fuentes, quien fue atleta de salto alto en los años 70`s. Thelma creció en su natal Jalapa, lugar donde inició su camino en el atletismo en las pruebas de velocidad, desde los siete años.
“Cuando tenía 16 mi entrenador Maco Estrada me involucró más en el salto. Empecé más enfocada y poco a poco me fue conquistando. El grado de complejidad, la concentración que debes de tener y sentir que podes volar eso fue lo que me enamoró y aquí me quede”, expresó sonriendo.
Objetivos claros
El inicio para la campeona nacional, no fue nada fácil y el apoyo de sus padres fue fundamental en todo momento, para convertir un pasatiempo, en una forma de vida.
“Durante varios años mi ascenso fue muy corto y con mucha paciencia, desde el 2017 he escalado fuerte. Cuando decidí hacer el salto triple, mis papas hacían el esfuerzo todos los viernes de traerme a la ciudad, para poder entrenar y mejorar cada día”, recordó con nostalgia.
Con el récord nacional absoluto de salto largo (6.36 metros) y salto triple (13.72 metros) en su espalda y establecidos en el 2018, Thelma continua trabajando firmemente por cumplir sus sueños. Su primero reto del año es lograr la clasificación a los Juegos Panamericanos de Lima, cuya marca de acceso (13.60 metros en salto triple) tiene que ratificar en sus próximas competencias.
“Mi día es muy intenso, casi no tengo tiempo para nada. Pero no es sacrificio, porque que me encanta lo que hago. Mis entrenos son a doble jornada. En pista por la mañana y en la tarde el gimnasio. Entreno cinco días a la semana, pero todo es por cumplir mi mayor anhelo, llegar a los Juegos Olímpicos”, comentó.
Como un reto más, no descuida sus estudios en la carrera de licenciatura en deportes de la Universidad de San Carlos. Aunque sabe que la prioridad en este momento es el deporte, sabe que debe esforzarse al máximo para concluir sus estudios superiores.
Thelma ha llevado alto el escudo de su Alma máter, prueba de ello son los múltiples logros en los Juegos Deportivos Universitarios Centroamericanos.
“Cada vez que salto, cuando inicio en la carrera respiro y trato de ser positiva en ese momento, cuando voy corriendo me siento como un tigre y cuando salto pienso que soy un quetzal”, explica.
“El deporte me ha hecho entender que los valores son parte fundamental de la vida, necesitas tener responsabilidad, respeto y disciplina. Principalmente me ha enseñado que siempre debo buscar la excelencia”, añade.
Una mujer con carácter
La jalapaneca, que en sus entrenos escucha todo tipo de música, se considera una mujer alegre y con mucho carácter, que intenta contagiar con su alegría a los demás, tanto en el deporte como en su trabajo con niños y adolescentes.
