En una reciente entrevista en Jimmy Kimmel Live, Kim Kardashian, compartió una anécdota poco conocida sobre sus días como la pequeña vecina de Madonna. En la charla, la empresaria reveló que durante su infancia se convirtió en la paseadora del perro de la reina del pop.
“Ella vivía al lado cuando yo tenía siete u ocho años” contó Kim, quien agregó con una sonrisa: “Mi hermana Kourtney y yo paseábamos a su mascota después de la escuela a cambio de sus joyas”, destacó la famosa.
La peculiar forma de pago incluía coloridas pulseras de neón, reliquias de los 80 que pertenecían a la fase disco de la artista. La ex esposa de Kanye West recordó cómo el acuerdo con su vecina se convertía en motivo de admiración de sus compañeros.
Este es el pago de Madonna a Kim Kardashian
“Un día ella bajó las escaleras y nos entregó una caja de zapatos con todas esas alhajas”, recordó. “Cuando Kourtney y yo fuimos a la escuela, todos dijeron: ‘¡Dios mío, me encantan tus pulseras!’ Y dijimos: ‘Gracias, Madonna nos los dio’”, añadió.
El viaje al pasado no terminó ahí. Kim también compartió que estuvo presente durante el rodaje del video musical de la canción Cherish, de 1989. “Mi amigo y yo estábamos en la playa y fue el momento más mágico de todos los tiempos”, resaltó Kardashian.
Años más tarde, Kim y Madonna volverían a vivir en casas aledañas, reiterando lo pequeño que es el mundo del espectáculo. “Ambas teníamos como máscaras e íbamos a la misma casa, luego nos miramos y yo dije, ‘¿M?’”. Ese encuentro, aunque breve, cerró nostálgicamente el primer círculo de su singular relación.
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El dúo cosechó una relación empresarial posterior, cuando en 2018 la marca de cuidado de piel KKW Beauty de Kim colaboró con MDNA Skin de Madonna.
