El pintor, Pashur House, creía que podría engañar al ojo humano mediante el arte de pintar un cuerpo desnudo.
Para ello, solicitó la ayuda de Julie, una joven que aceptó actuar de modelo con utilizar únicamente la ropa interior. El pintor le realizó un traje con camiseta blanca y jeans.
¡Increíble!
Julie quedó sorprendida al ver el trabajo final, hasta con pliegues en su ropa pintada.
“Con el uso de pintura corporal siento que me estoy quitando un escudo”, dice. “Estoy muy asustada, pero creo que va a ser un paso adelante”.
Luego de ver finalizada su ropa caminó alrededor de la oficina y ver cuántas personas lo notaban. Camina alrededor e incluso les pregunta a sus compañeros si notan algo diferente sobre ella. Algunos se toman su tiempo pero logran descifrar que es lo que está sucediendo. Sin embargo, si ella no les hubiera preguntando casi la mayoría no lo hubiera notado.
“Estaba asustada pero siento que he vencido un temor realmente enorme que tuve”, finalizó.