Guardianes de la Bahía fue una de las series de televisión más populares de la década de los 90 y junto a la célebre Pamela Anderson, la actriz Yasmine Bleeth fue uno de los rostros más famosos.
Durante tres años, la actriz dio vida al personaje de Caroline Holden en la serie norteamericana; sin embargo, lo que nadie veía en la pantalla chica es que Bleeth tenía diversos problemas y adicciones lejos de las cámaras y que acabaron por destruir su carrera.
La neoyorkina cayó en un círculo vicioso por culpa de las drogas, el alcohol y los desamores. La actriz fue despedida al final de la tercera temporada por haber asistido a las grabaciones bajo los efectos de la bebida y sustancias ilícitas.