El exguerrillero cubano Harry Villegas Tamayo, “Pombo”, uno de los seis sobrevivientes de la guerrilla de 1967, elogió este viernes los logros alcanzados por Bolivia “por la vía pacífica” que, según su punto de vista, hubiesen satisfecho “las aspiraciones del Che” Guevara.
“Los logros que ha alcanzado este pueblo por la vía no guerrera, no armada, sino por la vía pacífica (…), satisfacen las aspiraciones del Che y de todos los compañeros que cayeron aquí”, dijo Pombo, que llegó a Bolivia para participar del cincuentenario de la muerte del comandante guerrillero argentino-cubano.
“Desde que salí de aquí, hace 50 años, no había vuelto (..), entonces puedes imaginarte realmente la emoción, lo que representa desde el punto de vista humano, volver a estos lugares, que hicimos algo de nuestras propias vidas”, señaló Villegas a periodistas .
“Pombo”, uno de los tres cubanos sobrevivientes de la guerrilla del Che, dijo que para él “son recuerdos muy fuertes” volver al lugar participó en una lucha armada en la que tuvo “que matar”.
“Nosotros vinimos a ayudar a un grupo de jóvenes progresistas que querían una Bolivia distinta, una Bolivia más equitativa, que querían una Bolivia más feliz”, sostuvo
Según el ahora general cubano, que acompañó al Che también en el Congo, “las revoluciones no se hacen para el mal de los pueblos, las revoluciones se hacen para mejorar, para ser dueño de su destino (…) y ese era el sueño del Che, no solamente para Bolivia, sino para el Cono Sur”.
“Pombo”, llegó la noche del viernes a la ciudad de Santa Cruz, en el este del país, acompañado de Leonardo Tamayo Núñez, “Urbano”, quien ya estuvo otras veces en Bolivia, después del aniquilamiento de las fuerzas del Che por el ejército boliviano, asesorado por Estados Unidos.
“Ésta es la cuarta vez que yo estoy en Bolivia después de la muerte del Che. Yo estuve dos veces en busca de los restos de los compañeros (guerrilleros) y en otra oportunidad, ya estando (el presidente) Evo (Morales) en el poder, y ésta de hoy es para nosotros un momento de mucha recordación”, declaró.
Los dos exguerrilleros cubanos llegaron a Bolivia para participar en los homenajes al cincuentenario de la ejecución del Che, el 9 de octubre de 1967.