El parlamento de la provincia canadiense de Quebec aprobó este miércoles una ley polémica que prohíbe tener el rostro cubierto para ofrecer o recibir servicios públicos, una medida que se enfila contra el uso del velo integral como la burqa en la administración pública.
La ley sobre “la neutralidad religiosa del Estado quebequés” concierne tanto a los funcionarios de los gobiernos provinciales y municipales como a los ciudadanos que solicitan sus servicios.
Toda persona que ingrese a una oficina gubernamental, aborde un autobús o acuda a una escuela u hospital deberá ser fácilmente reconocible y tener el rostro libre de todo accesorio de vestimenta, señala el texto.
La ley 62 apunta la importancia de “tener el rostro descubierto durante la tramitación de servicios públicos para garantizar la calidad de la comunicación entre las personas, permitir la verificación de su identidad y por razones de seguridad”.
Pero también prevé la posibilidad de que los ciudadanos soliciten adaptaciones “razonable”, que serán evaluadas caso por caso.
Paradójicamente, la ley no prohíbe a los funcionarios portar símbolos religiosos.
La aprobación de la ley, sin el apoyo de los tres partidos opositores al gobierno liberal de Philippe Couillard, llega luego de una década de polémicas sobre las relaciones entre el Estado quebequés y algunas minorías.
El tema es sensible en Canadá, y particularmente en la francófona Quebec, donde la población le dio la espalda al catolicismo en los años 60, pero donde movimientos de extrema derecha han surgido recientemente en protesta contra comunidades inmigrantes.
El alcalde de Montreal, Denis Coderre, quien considera que su ciudad será especialmente afectada por la medida, denunció una ley “inaceptable” y de difícil aplicación en el día a día, según él.
Fuente: AFP