Los datos de la sonda japonesa de observación lunar Selene confirmaron la existencia de esta gruta, de 100 metros de ancho y 50 kilómetros de largo, que podría haber sido un túnel de lava volcánica hace 3.500 millones de años.
“Pensábamos que existen lugares así (…) pero todavía no había sido confirmado hasta ahora”, dijo el jueves a la AFP Junichi Haruyama, un investigador de la Jaxa.
Este inmenso túnel, situado bajo la zona de las colinas Marius, podría proteger a los astronautas de las importantes variaciones de temperatura y de las peligrosas radiaciones a las que se exponen en la superficie lunar, explicó Haruyama.
“Todavía no hemos visto el interior de la cueva y esperamos que su exploración nos dará más detalles”, añadió.
Japón anunció en junio un proyecto para enviar un astronauta a la Luna en 2030, una primicia para un país cuyos astronautas sólo han viajado hasta ahora a la Estación Espacial Internacional (ISS).
La primera etapa del proyecto consiste en participar en una misión de la Nasa para construir en 2025 una estación espacial en órbita alrededor de la Luna.
Por su parte Estados Unidos quiere volver a la Luna en el marco de un programa a más largo plazo para enviar astronautas a Marte en 2030, con la participación de otras agencias espaciales.