La actriz italoestadounidense Annabella Sciorra acusó a Harvey Weinstein de haberla violado en la década de los noventa y acosado en los años siguientes a ese suceso, informó la revista The New Yorker, que ayudó a destapar el historial de agresión sexual del productor.
En un artículo de seguimiento al escándalo Weinstein, revelado por varios reportajes del diario The New York Times y esa revista, la actriz de “Los Soprano” se sumó al medio centenar de mujeres que se han declarado víctimas del que fuera productor estrella de Hollywood.
Consultada inicialmente por la revista para el primer reportaje, en el que trece mujeres acusaban a Weinstein de acoso y la actriz Asia Argento de violación, Sciorra negó tener alegaciones que hacer contra el productor, pero dos semanas después contactó a la publicación para desdecirse.
Sciorra dijo haber encontrado un “detonante” para hablar sobre su experiencia al conocer los testimonios de otras mujeres y escuchar la grabación policial en la que Weinstein pide insistentemente a una modelo que vaya a su habitación.
La actriz explicó que después de filmar “The night we never met” (1993) entró en una dinámica de eventos con el “círculo de Miramax”, el estudio confundado por Weinstein, y después de asistir a una cena con él, el productor se ofreció a dejarla en casa como había hecho en otras ocasiones.
Una vez en su apartamento y preparada para dormir, alguien llamó a su puerta. “No era la mitad de la noche, así que abrí una ranura de la puerta para ver quién era. Y él (Weinstein) abrió la puerta de un empujón”, recordó.
De acuerdo al testimonio de Sciorra, el productor entró en su casa y se descamisó mientras inspeccionaba si había alguien más. La actriz, que estaba sola y en camisón, afirmó que éste la acorraló en su habitación, ignoró sus peticiones para que se fuera de allí y la lanzó a la cama.
“pateé y grité”, declaró la actriz, que acusó a Weinstein de sujetar sus brazos y forzarla sexualmente. De manera similar al testimonio de la actriz Asia Argento, Sciorra señaló que el productor le practicó sexo oral forzado y ella luchó para evitarlo, pero le “quedaba poca fuerza”.
La actriz italoestadounidense, que no denunció a la policía, añadió que sufrió el impacto de la “maquinaria Harvey” en su vida, ya que no volvió a trabajar hasta 1995, y años después, cuando retomó su carrera, el productor la acosó al coincidir en varios hoteles con ella en diferentes eventos.
En el mismo artículo se incluye otra acusación de acoso, la de la actriz estadounidense Daryl Hannah. Hannah desgranó que en la década de los 2000, mientras promocionaba “Kill Bill: Volume 2”, Weinstein entró en su habitación, de la que, al parecer, tenía una llave.
“Entró como un toro enrabietado. Sé con cada fibra de mi ser que si mi maquillador no hubiera estado en la habitación, las cosas no habrían ido bien”, señaló a la revista. Antes de irse, Weinstein le dijo que se vistiera y fuera a una fiesta en el hotel, pero al llegar, la recepción estaba “completamente vacía”.
Cuando iba a tomar el ascensor para volver a su habitación, el productor supuestamente le preguntó si sus pechos eran “reales” y si podía tocarlos. Tras la negativa, la actriz dijo haber tenido “repercusiones”: el avión de Miramax despegó sin ella al día siguiente, y sus vuelos y hotel para Cannes fueron cancelados.
La portavoz de Weinstein envió una declaración a la revista en respuesta a las alegaciones de Sciorra y Hannah, en la misma línea que las anteriores: “El señor Weinstein absolutamente niega cualquier alegación de sexo no consensuado”. EFE