Un repartidor de pizzas de China estrelló la cabeza en la puerta de un restaurante, apurado por recoger una orden.
El repartidor se quedó sosteniendo la manija, mientras caía una lluvia de cristales.
Los comensales quedaron asustados al ver que la puerta quedó destruida en cuestión de segundos, afortunadamente ninguna persona resultó herida.
https://youtu.be/MDKdNQoFdGU