Un niño de dos años, olvidado al interior de un vehículo, falleció hoy tras permanecer en el automóvil unas ocho horas bajo una temperatura cercana a los 30 grados centígrados a la sombra, según confirmó Carabineros.
El hecho ocurrió después de que el padre del menor llegara a su trabajo con él en su automóvil y, por causas que se investigan, lo dejó en el vehículo y continuó con su rutina laboral en un colegio de la comuna santiaguina de Ñuñoa.
Recién a las 16.00 hora local (19.00 GMT), el hombre recordó que su hijo estaba en el estacionamiento del Colegio San Agustín, no obstante al abrir la puerta del vehículo, el pequeño se encontraba sin vida.
Por instrucción de la Fiscalía de Ñuñoa, la investigación por el deceso del niño quedó en manos de la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones (PDI) de Chile.
El fiscal Ernesto Navarro, señaló que “nunca nadie en el colegio supo de que el hombre llevaba el niño en su vehículo, hasta que él en compañía de otra persona, tras finalizado su turno de trabajo, llegó al automóvil y se percató de que el niño había muerto. Allí comenzaron los gritos”, aseveró.
En declaraciones a radio Biobío, Navarro confirmó que el hombre fue detenido y que recién después de recibir los informes del Servicio Médico Legal, se sabrá si el niño murió por sofocación debido a que los vidrios del coche estaban totalmente cerrados, nunca fue hidratado, y al fuerte calor que había en el exterior.
El persecutor señaló que es probable que sea acusado de “delito culposo”, por negligencia inexcusable del padre. Aunque precisó que primero se investigará si el hombre traía habitualmente al niño al trabajo y, si ello se confirma, la acusación podría cambiar a homicidio simple.
Los padres y apoderados que llegaron a buscar a los estudiantes, tras la suspensión de clases por el suceso, señalaron a los periodistas que el pequeño debe haber soportado al interior del automóvil unos 40 grados celsius.
Fuente: EFE