De ser la única mujer con peso en la trilogía original, Fisher pasó en los nuevos filmes de “Star Wars” a ser la general Leia Organa.
Un año después de la muerte de la actriz Carrie Fisher, los fans de “Star Wars” conservan muy presente el recuerdo de la princesa Leia mientras que el público general ha redescubierto la figura de una carismática mujer que vivió su vida de frente y con total valentía.
El reciente estreno de “Star Wars: The Last Jedi”, con la última aparición en el cine de Fisher, ha culminado un año de numerosos homenajes a la actriz, quien falleció a los 60 años en Los Ángeles el pasado 27 de diciembre, cuatro días después de sufrir un infarto en un avión.
El destino guardaba un perverso giro final ya que solo un día después del fallecimiento de Fisher murió su madre, Debbie Reynolds, la inolvidable y pizpireta protagonista de “Singin’ in the Rain” (1952).
Star Wars ahora es diverso
En la nueva película Fisher amadrina a toda una serie de heroínas que luchan contra el Lado Oscuro.
Daisy Ridley como Rey es la máxima exponente, pero también otras como Laura Dern (Holdo) o Kelly Marie Tran (Rose) han contribuido a que el universo de “Star Wars” sea saludablemente más femenino y diverso.