Una persona está buscando deshacerse de una pieza de arte supuestamente “embrujada” después de presenciar una serie de actividades “inexplicables” dentro de su hogar.
La pintura de un tazón se compró en una tienda de antigüedades de Pauanui, Nueva Zelanda, pero la propietaria del cuadro sospecha que “algo entró en la casa junto con la pintura”.
La propietaria explicó que la pintura se cayó de la pared una noche mientras experimentaba otros eventos paranormales.
“Otra noche, una figura sombría apareció en la ventana de la habitación de arriba, donde se colgó la pintura”, escribió la vendedora en una página de ventas en internet llamada Kiwi Trade Me.
La vendedora explicó decidió vender la pieza pues es demasiado “espeluznante tenerla, además recomendó que el comprador, sea alguien interesado en los Paranormal.
Con información de NZHerald