“Podremos ver, durante el eclipse, los reflejos sobre la superficie lunar de todos los amaneceres y puestas de sol en la Tierra”, explica Sarah Noble, una científica de la NASA.
Un fenómeno celeste similar ocurrió el 30 de diciembre de 1982 y fue visible en Europa, en África y en el oeste de Asia. En cuanto a América del Norte, hay que remontarse a hace 152 años, al 31 de marzo de 1866.
El término “Luna azul” se refiere a una segunda luna llena en un mismo mes, un fenómeno que ocurre en promedio cada dos años y medio.
El eclipse ocurre solo 27 horas después de que la luna alcanza su punto orbital más cercano a la Tierra, llamado perigeo, produciendo casi una “superluna”, explican los astrónomos.
Un eclipse de estas características también se conoce como “Luna de sangre” porque el astro no queda completamente negro, pues una parte de la luz del Sol, reflejada por la atmósfera terrestre, alcanza indirectamente la superficie lunar. Algunos rayos solares también se filtran, produciendo un reflejo rojizo o cobrizo en la Luna.
Mire acá la transmisión en directo de la NASA:
Check out this view of the partial lunar eclipse from @NASAArmstrong! The Earth is currently moving out from between the Sun and Moon. Continue watching the #SuperBlueBloodMoon online here: https://t.co/vVbJblsWE9 pic.twitter.com/dnY9n0AgMq
— NASA (@NASA) 31 de enero de 2018
LIVE NOW: Watch views of the #SuperBlueBloodMoon from multiple telescopes. Take a look: https://t.co/a5ScGDXhQu
— NASA (@NASA) 31 de enero de 2018
Fuente: Caracol y la NASA.