Hablar de la patineta de cuando uno era chico es hablar de esos juguetes que nunca se olvidan, de los que te traen más recuerdos. La bicicleta y la patineta son 2 de las cosas más difíciles de olvidar de nuestra infancia.
Nuestra primera patineta. No recuerdo cómo llegó a casa, si fue heredado, regalado o comprado. El caso es que cuando llegaba Octubre, epoca de vacaciones aprovechábamos para salir a trotar por la colonia.
Algunos usamos la patineta de un hermano o primo para probar. Aunque no supieramos mantener el equilibro con la patineta y nos dieramos tremendos raspados en la rodilla, siempre era divertido.
No era nada fácil su manejo pues las ruedas de la patineta de esa época eran muy inestables. Al final siempre acababas sentado en él y tirándote por alguna cuesta medianamente pronunciada. Esa forma de jugar con la patineta era un poco más segura.
Recuerdo que algunos tenían su patineta de madera. La mía era verde manzana. En esa época eran de un solo color. Un color que siempre era chillón (amarillo, verder, naranja). Algunos le poníamos calcomanías para personalizarlas y adaptarlas a nuestro gusto.
Recuerdo que además le daba un uso casero a la patineta en casa. Simulaba ser un tranporte para mis muñequitos de las guerras de las galaxias. Recuerdo ese ruidito tan sabroso que hacía las ruedas cuando las movías con las manos deprisa. Que recuerdos tan buenos
Y ustedes, ¿Qué recuerdan de su primera patineta cuando eran patojos?