1) A pesar que esta empresa se ha globalizado tanto y existen restaurantes en la unión americana, como buenos chapines seguimos llevando nuestras cajitas de Pollo Campero para saturar de grasa el avión y dejar ese aroma único.
2) Llevamos un cargamento de chucherías como si se fuera acabar el mundo. De esas ricas que no venden en los USA y los primos y tíos matan por comer aunque sea un poquito.
3) Pasamos los tamalitos de chipilin en la aduana como si se tratara de un cargamento de drogas.
4) EL 98.7% de las veces que viajamos a Estados Unidos nos perdemos en sus “pequeños” aeropuertos.
5. Aunque sabemos que vamos a estar de vuelta en un par de semanas no podemos dejar pasar la oportunidad de llorar en la entrada del aeropuerto. Las típicas despedidas de avión, mas dramáticas que la escena de Jack y Rose en el Titanic.
6. Aunque no quepa la ropa no pueden faltar las cajitas con dulces típicos “pa la family en los USA”.
7. Como buenos chapines nos ponemos nuestros mejores vestidos para viajar en avión.
8. No perdemos la oportunidad de practicar nuestro ingles “fluído” cuando llegamos a la aduana de cualquier aeropuerto en Estados Unidos. Igual que en los anuncios de Open English.
9. No podemos dejar pasar la oportunidad para gritarle a todo el mundo que nos vamos a subir un avión.