Para la mayoría de las mujeres, sus anillos de compromiso y boda son las joyas más especiales.
Independientemente del costo o valor, son extremadamente oracionales y representan las cosas más importantes en sus vidas: el amor.
Así que es fácil ver por qué una mujer estaba molesta y confundida cuando descubrió que su caro anillo de compromiso de diamantes era en realidad falso.
No estaba molesta en absoluto por no tener un diamante real, pero está más molesta por el hecho de que su prometido mintió, y se enteró de una manera bastante embarazosa.
Su novio hizo esta pregunta hace dos años, y desde entonces su enorme anillo ha atraído mucha atención, con personas que dicen que debe ser al menos de dos quilates.
La pieza en realidad está hecho de zirconia cúbica, lo que significa que, aunque todavía era caro, no era el gran diamante que dijo que era.