Las divisiones juveniles de los clubes de fútbol de Argentina, cantera de jugadores y destino soñado de miles de chicos y sus familias, están sacudidas por un escándalo de redes de prostitución de menores.
Hace dos semanas, directivos del club Independiente hicieron la primera denuncia ante la justicia, luego de que uno de los jóvenes le contara sobre los abusos al psicólogo del equipo, pero las investigaciones se extendieron ahora a River Plate y Temperley.
“Si esto no lo paramos, va a seguir pasando. Los pedófilos aprovechan las necesidades de los chicos, como tener unas zapatillas de marca conocida o un celular nuevo, para hacerles tener sexo”, dijo a la AFP María Elena Leuzzi, titular de una ONG de ayuda a víctimas de abusos.
Leuzzi, de 64 años, vendedora de pan y helados en una modesta vivienda de Virreyes, en la periferia de Buenos Aires, es presidenta y fundadora de la Asociación de Víctimas de Violación (Avivi) que patrocinó este martes la denuncia judicial de una médica por tres casos de abuso sexual en River, ocurridos entre 2004 y 2011.
A causa de la denuncia, sufrió amenazas, según señaló. Un periodista de la AFP comprobó cómo la policía le entregó en su casa un botón antipánico para que pudiera avisar en caso de peligro.
También gimnastas
Tras el escándalo en los clubes de fútbol, las denuncias por supuestos abusos contra menores salpican ahora a la Confederación Argentina de Gimnasia. El Comité Olímpico Argentino impulsó una investigación judicial contra un entrenador de la selección de gimnasia y sospecha que hay varias víctimas.
Jueza a sindicado de abuso sexual: "Acabo de firmar su sentencia de muerte" https://t.co/36AiNh62Q2 pic.twitter.com/cEEnzfyDWc
— Emisoras Unidas (@EmisorasUnidas) January 25, 2018