Los cuatro años de guerra en el Yemen han obligado a muchos residentes de la capital, Saná, a recurrir al uso de la leña para cocinar, porque ya nos les quedan recursos para adquirir bombonas de gas para sus hogares.
“No tenemos gasolina y no podemos encontrar nada”, dice a Efe Ahmed Hamoud al Zarqa, que está totalmente desesperado y acude a un mercado para comprar la leña siempre y cuando el precio se lo permite.
“Esta leña que compramos no es suficiente. Un día o dos y se termina”, afirma.