La diplomacia del ping pong funciona para Corea del Norte y Corea del Sur, que han combinado sus equipos femeninos en el Mundial de tenis de mesa.
Los equipos de las dos naciones vecinas decidieron no enfrentarse en los cuartos de final del torneo que deberían disputar el jueves en Suecia, dijo la Federación Internacional de Tenis de Mesa (ITTF). A cambio, pidieron formar un equipo unificado que pasaría a las semifinales.
Las deportistas coreanas “recibieron una gran ovación de los delegados que mostraron su apoyo a esta iniciativa histórica”, dijo el presidente de la ITTF, Thomas Weikert.
Esto “una declaración importante para promover la paz entre nuestros países a través del tenis de mesa”, dijo la delegación surcoreana.
La decisión sigue a una intensa campaña diplomática transfronteriza que culminó con la histórica cumbre entre el líder norcoreano, Kim Jong Un, y el presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, en una localidad de la zona desmilitarizada la semana pasada.
El equipo combinado de Corea se enfrentará a las vencedoras del choque entre Japón o Ucrania.