Una madre sonrió y reconoció su belleza por primera vez en ocho años después de que los cirujanos le extirparon su enorme tumor facial.
Conocida solo como Yaya, la joven de 27 años apenas podía hablar o comer debido a la gran masa que crecía dentro de su boca.
El tumor, que se extendía por un lado de la cara y alrededor de la barbilla, la dejó demasiado avergonzada para salir de su casa.
Ella solo se atrevería a aventurarse fuera y entrar en contacto con extraños cuando su rostro estaba completamente cubierto por una bufanda.
Pero, después de una operación de cirujanos a bordo de un barco caritativo, Yaya, de Camerún, África, se enorgullece de su “nueva” cara.
Sentirse bella de nuevo
Hablando sobre los resultados del procedimiento de cambio de vida por primera vez, les dijo a los médicos: “Me siento hermosa y feliz”.
Yaya, quien fue operado por médicos de la organización benéfica Mercy Ships, agregó: “Desde la cirugía, me siento liberada. Todo es más fácil de hacer”.
