Con información de la agencia de noticias: AFP
Estados Unidos y China retoman este viernes las delicadas negociaciones comerciales, en un ambiente tenso por los mensajes contradictorios de Donald Trump, y a menos de una semana de que entren en vigor las posibles sanciones estadounidenses a los productos provenientes del gigante asiático.
El jueves “los responsables estadounidenses han compartido (con los chinos) el objetivo claro del presidente de una relación comercial justa con China”, dijo en un comunicado la Casa Blanca.
Ese día, Trump recibió al viceprimer ministro chino, Liu He, en la presidencia. “Comienzan las conversaciones”, había indicado en Twitter.
Poco antes de la reunión, el mandatario echó un balde de agua fría a la posibilidad de un rápido acuerdo con China. “Tiendo a dudarlo”, dijo Trump a periodistas que le preguntaron sobre si se alcanzaría un acuerdo.
“China se ha tornado muy malcriada… Porque siempre obtuvo el 100% de lo que pide a Estados Unidos”, añadió.
La cita con Liu He, un cercano colaborador del presidente chino Xi Jinping, no estaba inicialmente en la agenda de Trump. “Esto significa que hay un gran interés en continuar las negociaciones y tratar de encontrar soluciones concernientes a las prácticas comerciales desleales e ilegales”, dijo el consejero económico presidencial Larry Kudlow. “Es lo que queremos”.
#China prepara a su sector tecnológico ante la batalla comercial con #EEUU.
Más detalles aquí ► https://t.co/0EQPsmvVv1 pic.twitter.com/gI8PmhJmOY
— Emisoras Unidas (@EmisorasUnidas) May 2, 2018
– “Falsos rumores” –
Según el diario The New York Times, Pekín estaría dispuesto a hacer importantes concesiones, pero nada se filtró el jueves sobre las conversaciones entre el mandatario y Liu He, ni con su secretario del Tesoro, Steven Mnuchin.
Washington exige a China una reducción en 200.000 millones de dólares de un déficit comercial que en 2017 alcanzó los 375.000 millones.
La agencia financiera Bloomberg, citando a un miembro del equipo de Trump, indicó que Pekín ofreció esta semana reducir su excedente con Estados Unidos en 200.000 millones.
Pero el ministerio de Relaciones Exteriores de China desmintió el viernes “los falsos rumores” a través del portavoz Lu Kang, quien indicó que las conversaciones con Estados Unidos fueron “constructivas”.
Trump, quien reiteradamente ha denunciado las prácticas comerciales “desleales” del gigante asiático, estimó el jueves que “el comercio ha sido una calle de una sola vía” con Pekín.
“Y ya le explique al presidente (de China) Xi (Jinping) que no podemos hacer eso más”, remarcó.
Washington amenazó con imponerle aranceles a productos chinos por 150.000 millones de dólares por considerar que Pekín incurre en prácticas comerciales desleales y vulnera derechos de propiedad intelectual.
Ya con gravámenes del 25% a las exportaciones de acero hacia Estados Unidos y de 10% en las de aluminio, China también amenaza con gravar la importación de bienes estadounidenses por 50.000 millones de dólares.
#China anuncia medidas 'antidumping' para caucho importado de #EEUU y #UE.
Más detalles aquí ► https://t.co/JrknB9Z8j6 pic.twitter.com/rK1l7j7rh0
— Emisoras Unidas (@EmisorasUnidas) April 19, 2018
– Cerdo y soja –
El plazo de consulta sobre la lista de productos chinos que serían afectados por esas nuevas tasas arancelarias vence el 22 de mayo. Si antes de esa fecha ambos países no llegan a un acuerdo sobre un reequilibrio de la balanza comercial, las amenazas del gobierno de Trump se concretarán.
China ya anunció que en ese caso aplicará medidas de represalias equivalentes que se centrarían en productos agrícolas, en especial la soja, una producción muy dependiente del mercado asiático y que se concentra en estados afines al presidente republicano.
La carne de cerdo producida en Estados Unidos, así como los autos que fabrica también están en la mira de las autoridades de aduana chinas, que anunciaron que reforzarán las inspecciones sobre estos productos.
China anunció el viernes que suspenderá las medidas previstas contra las importaciones de sorgo estadounidense para evitar un alza de los costos de producción para los ganaderos, especialmente para la industria porcina.
Pekín había anunciado en abril que impondría un impuesto de hasta 178,6% para las importaciones de sorgo proveniente de Estados Unidos, en respuesta a las sospechas de ‘dumping’ (la venta por debajo del coste de producción) y de subvenciones en Estados Unidos.
Un gesto de buena voluntad potencial hacia Estados Unidos, aunque el portavoz de la diplomacia china pidió no sacar conclusiones apresuradas.
Con información de la agencia de noticias: AFP
Aumenta el superávit comercial de China con EEUU en plena crisis comercial.
Vea aquí: https://t.co/RbkcxhuD8P pic.twitter.com/fFcHDvlX3V
— Emisoras Unidas (@EmisorasUnidas) April 13, 2018