Este es el momento extraordinario en que la policía de Brasil abrió una baldosa de concreto para encontrar a un convicto fugado, que había estado huyendo durante más de tres años, escondido en un búnker subterráneo.
Los policías capturaron a Jean Gomes Chiola en las primeras horas de la mañana del martes después de un aviso anónimo de que el fugitivo estaba escondido en la propiedad en Macaíba, al noreste de Brasil.
El búnker estaba a unas 10 millas de la Penitenciaría del Estado de Alcaçuz, donde cumplía una condena por delitos de narcotráfico.
El hombre de 39 años fue arrestado junto con su hijo, Jean Felipe, de 20 años, en una incursión conjunta entre la policía militar y civil que llegaron a la residencia subterránea con una orden de allanamiento.
Junto con el asombroso descubrimiento, los agentes se apoderaron de un revólver calibre 38 y varias envolturas de drogas.
Video: Daily Mail
