El primer amor nunca se olvida, sobre todo porque despierta sentimientos nuevos. Todo parece de fantasía y son experiencias únicas. Pero ¿qué pasa cuando te enamoras por segunda vez?
Crees que tu primer amor será el ultimo?
Seguro pensaste que nunca pasaría, que no ibas a fijarte en alguien más después de tu primer amor porque te dolió tanto su partida que estabas seguro de que jamás ibas a superarlo. Fue la primera vez que te rompieron el corazón, pero no es el fin del mundo, aunque lo parezca. Entonces te pones a pensar en lo que hiciste bien y en lo que hiciste mal, te culpas y te preguntas por qué fracasó tu primer amor, creándote la idea de que no volverías a amar jamás y que no te volverían a amar. Sin duda te quedas con una cicatriz en el corazón, por ello la persona que llegue deberá aceptarte con todo y tu pasado, aunque para eso deberás superarlo y dejarlo atrás. Y entonces sucede: logras liberarte de esa persona y del amor que se tuvieron.
Empiezan a interactuar y a intercambiar ideas y gustos, salen durante un tiempo y de repente, cuando menos te das cuenta, lo lograste, te enamoraste otra vez. Te enamoraste de la persona que menos pensabas y en el momento más inesperado. Te hace sentir bien, estás feliz y seguro, la soledad se va alejando poco a poco y disfrutas de los momentos con su compañía que se va volviendo especial. Al principio te invade el miedo, pero te dejas llevar porque sientes que todas las emociones que consideraste muertas renacen y de sorpresa vuelves a tener mariposas en el estómagos. No todas las relaciones serán iguales, cada una te deja experiencias únicas de las que aprendes cosas nuevas.
El segundo amor te vuelve la confianza, logra tocar tu corazón y entiendes que es libre. No obligas a que las cosas pasen y sean perfectas, sino que éstas se van dando solas. Todos los miedos se van y quedan atrás, te vuelves una persona más segura amorosamente, tu corazón se fortalece y te convences de que todo pasa por algo y que tu primer amor no sería el único, aunque sí muy especial. Éstas son algunas cosas que puedes pasar cuando te enamoras por segunda vez. Disfrútalas y no temas a ser feliz por segunda vez al lado de alguien.
Crees que no podrás confiar en nadie nunca más
Sientes que la confianza que tuviste con tu primer amor no la podrás tener con otra persona. La conexión que tenían era única, pero no te preocupes. La segunda vez que te enamoras te das cuenta de que no es así; te sientes afortunado por tener a alguien especial contigo, sobre todo porque pensaste que no volvería a pasar. Más que novios, se vuelven amigos y descubres que eso es todo lo que necesitas. Comparten secretos, hablan de cualquier tema en el mundo, ríen juntos y van descubriendo cosas de ustedes con el paso del tiempo.
No cometes los mismo errores
Tomas las cosas con más calma y desarrollas la habilidad de arreglar cualquier conflicto con tranquilidad. Has madurado, no actúas de la misma manera e intentas que todo fluya de la mejor manera. Ya no provocas peleas sin sentido, cuidas tus celos y los reclamos. Si algo te molesta, piensas en hablar tranquilamente y decir todo lo que te disgusta, te das cuenta de que lo importante no es ganar una discusión, sino arreglar la diferencia.
Vuelves a creer en el amor
Tu ilusión volvió. Claro que vuelves a creer en el amor, pero ahora lo tomas con mayor madurez, entiendes que nada es para siempre y te encargas de disfrutar el momento. Te convences de que nadie le pertenece a nadie y por eso construyes una relación más madura y sólida. El amor no es como en las películas, pero sabes que es real y que lo estás sintiendo… otra vez.
Te das cuenta de que no todo debe ser perfecto
Ya no buscas rectitud ni al príncipe azul de cuentos de hadas. Sabes que ni tú ni tu pareja son perfectos y mucho menos su relación. Aceptas a la otra persona con sus defectos y esa persona a ti. No hay reglas, no todo debe ser color de rosa y por fin lo entiendes.
Eres más cuidadoso
Vas más lento. Ya no expones rápidamente tu corazón porque sabes todos los riesgos que puede traer el amor y el dolor que sientes cuando éste se va. Te tomas el tiempo para conocer a la otra persona, quieres asegurarte de que despierte emociones en ti y que sea recíproco. Te convences de que esa persona sea la indicada para volver a entregarte sin miedos y de que valdrá la pena.
Tienes experiencias nuevas
Creías que con tu ex habías vivido todo y habías sentido todas las emociones, pero no. Esta nueva persona te enseñará cosas nuevas y despertará sensaciones diferentes. Vivirán experiencias completamente distintas y mucho más emocionantes. Descubren juntos, crean sus propias aventuras y definitivamente se abren nuevos panoramas en el amor.