La mirada recatada de Meghan Markle está muy lejos de sus antiguos días como actriz cuando prefería faldas cortas y vestidos de fiesta.
Pudimos adivinar el color del vestido de novia de Meghan antes de que lo viéramos, blanco.
Pero a medida que transcurrieron las semanas, parece que la nueva Duquesa de Sussex se apega a una paleta suave de colores, y la Reina es la razón.
Nuestro primer atisbo de la recién llegada se produjo pocos días después de su boda con el Príncipe Harry, cuando la pareja asistió a la fiesta de cumpleaños del Príncipe Carlos.
La nueva integrante real usaba un vestido rosado de Goat, con sombrero y clutch a juego.
Fue en Trooping of the Color cuando volvimos a ver a la ex actriz, esta vez ella optó por otro vestido rosa pálido, esta vez por Givenchy, y ha seguido con los colores neutrales a lo largo de todos sus compromisos.
El experto en moda Lucas Armitage ha revelado que puede haber una razón “muy inteligente” por la cual Meghan se apega a una paleta de tonos neutros.
Él le dijo a Femail : “Siento que esta es una táctica de estilo inteligente, ya que siempre funcionará con la mirada de la Reina; ella es conocida y aplaudida por su uso de brillantes colores divertidos”.
“El uso de color neutral en la parte de Meghan es también una muestra de respeto a la Reina, por lo que nunca se ve como si estuviera tratando de eclipsarla”, agregó.
