La falta de médicos y medicamento en los hospitales de Venezuela fue la gota que derramó el vaso de la familia Lobo, lo que causó que empacaran sus pocas pertenencias se subieran a su camioneta y huyeran en busca de un mejor calidad de vida.
El ingeniero en Sistemas Armando Lobo, llevó a su hija a una operación en el hospital local, pero la falta de médicos y técnicos en el hospital Luis Ortega de Porlamar casi complica la salud de su hija.
Armando y su esposa Selene, además de sus tres pequeños hijos, Sara convaleciente de 11 años, Isaías de 10, Anabella de 4 años, y hasta el perro de la casa, emprendieron su travesía de emigrantes que duró 28 días por carretera, desde la Isla de Margarita, saliendo por Brasil, atravesaron la selva del Amazonas, la cordillera de Perú hasta llegar a Santiago de Chile.
La familia vivió 7 mil kilómetros de aventuras extremas, y momentos difíciles.
Durante su paso por la selva del Amazonas estuvieron rodeados de culebras, pumas y otros animales salvajes, además el carro se les apagó varias veces.
Después que superaron todos estos peligros, Armando relata que lo peor aún estaba por venir, no querían entrar a Chile por Bolivia porque el Presidente Evo Morales, que es del mismo corte del Gobierno de Venezuela, y tomaron la decisión de seguir por un tramo más largo para entrar a Chile, a través de Perú, por lo que subieron la cordillera andina, donde sus tres hijos enfermaron y el carro de nuevo falló.
“La mejor parte del viaje fue la experiencia. La experiencia significa que hicimos algo que se hace una vez en la vida, y creo que hay pocas ocasiones en nuestras vidas en que podamos decir eso”, dijo Lobo.
“Hay cosas que solo puedes hacer una vez en la vida y este viaje sirvió como un largo punto de aprendizaje para nosotros porque pasamos un mes en el camino. Pero tenemos muchos buenos recuerdos”, agregó.
Con información de Venezolanos por el Mundo